Un Pacto de Ciudad por El Vacie

He tenido la oportunidad de expresar en público mi profunda preocupación por el anuncio realizado por el Gobierno del PSOE-IU, a través de los medios de comunicación, de ejecutar un plan para El Vacie, cuya novedad principal es el vallado del asentamiento, y que en ningún caso contempla los realojos necesarios en viviendas dignas.

Hace unos días, los andalucistas denunciábamos que se ha producido, nuevamente, un desprecio a los grupos que formamos la Corporación, y a los colectivos afectados, pues el Plan no contaba con ningún consenso. Advertíamos de su inviabilidad por los vicios con los que nace, pero sobre todo porque las medidas anunciadas van en contra de las numerosas recomendaciones que el Defensor del Pueblo hacía en su Informe al Parlamento, dado a conocer por el PA el pasado 28 de febrero.

Desde esta fecha y hasta hoy han sido muchos los colectivos que se han pronunciado rechazando este plan del Gobierno; desde el propio Defensor del Pueblo, al Cardenal Amigo Vallejo, los vecinos de la zona aledaña, la Asociación Pro Derechos Humanos y los propios habitantes del asentamiento. Y nos consta que igualmente lo rechazan otras asociaciones que trabajan con el pueblo gitano.

Los andalucistas tenemos un proyecto para el Vacie. Un proyecto que hemos elaborado con las personas que están trabajando allí y que nos han orientado sobre las posibles soluciones. Un proyecto que no se basa en grandes inversiones y en dinero que finalmente no soluciona el problema, sino en procedimientos de socialización que tienen como objetivo último que el Vacie pueda ser demolido. El alcalde no nos ha escuchado, no ha tenido en cuenta nuestra opiniones y, por tanto, que se sepa que en estas circunstancias no cuenta con nuestro apoyo.

La única lectura que tiene la actitud del Gobierno es haber querido poner a todos los agentes afectados “entre las cuerdas” para que, en un alarde de oportunismo, el alcalde pueda ofrecer, después de 8 años, un anuncio de solución que no es tal, y que llega en el momento más inoportuno sin contemplar medidas efectivas para la erradicación definitiva del asentamiento.

Todos los sevillanos y sevillanas nos sentimos avergonzados por la existencia del núcleo chabolista más antiguo y numeroso de España. Su erradicación no será el éxito de nadie en particular, sino el resultado de un compromiso de todos por hacer las cosas bien de una vez por todas. Quiero una Sevilla sin exclusión ni marginación, y estoy seguro que todos los sevillanos también.

Pero para que El Vacie sea sólo historia es preciso que todos, pobladores, vecinos del entorno, voluntarios que trabajan en el asentamiento y partidos políticos, vayamos de común acuerdo, sin sectarismos ni protagonismos que a nada conducen. Sólo desde un "Pacto de Ciudad por El Vacie" será posible una solución. Con este fin, he convocado a todos los agentes sociales y políticos antes citados para que nos reunamos todos juntos y nos comprometamos para, en consenso, trabajar juntos para acabar con lo que, sin duda, es la mayor vergüenza de Sevilla. Confío en la buena voluntad de todos para que sea posible.