Sobre la imposibilidad de acceder a una vivienda en Sevilla

Los últimos datos que se han hecho públicos sobre el precio de la vivienda en Sevilla han puesto al descubierto la propaganda vacía con la que el gobierno reaccionario PSOE-IU intenta tapar su incapacidad de gestión en esta materia. Y es que los datos son verdaderamente espeluznantes: durante los siete años de mandato de Monteseirín el precio medio de la vivienda en Sevilla ha pasado de 986 euros por metro cuadrado a los actuales 2.445 euros. Es decir ¡una subida del 148%! Sólo durante el 2006 la subida ha sido del 15'4% y el precio medio de un piso en Sevilla es en la actualidad de 244.500 euros, más de 40 millones de pesetas. Con estos datos, la inmensa mayoría de los sevillanos o no podremos comprarnos una vivienda o nos entramparemos de tal manera que nuestra vida en los próximos 30 años se reducirá a pagar la hipoteca y ver la televisión (la gratuita, por supuesto, porque no tendremos para suscribirnos a los canales de pago).

Esta situación no es una casualidad, ni fruto de una de esas fantasmagóricas conspiraciones con las que nuestro inefable alcalde justifica sus incompetencias, negligencias y fracasos. Es consecuencia directa de la política de suelo y vivienda del gobierno PSOE-IU. Lo cierto es que Monteseirín y su equipo han favorecido por acción, en casos como las recalificaciones de Heineken, y por omisión, evitando actuar ante los abusos que se dan cada día en el mercado de la vivienda, a que Sevilla sea una de las ciudades donde más difícil es el acceso a la vivienda.

Tenemos que recordar que el equipo de gobierno PSOE-IU han convertido al Ayuntamiento en el mayor agente especulador de la Ciudad, no sólo no han sido capaces de poner freno a las ansias especuladoras del Gobierno Central y de la Junta de Andalucía, que siguen aprovechándose de Sevilla manteniendo bajo su poder grandes bolsas de suelo que, como ha venido haciendo en los últimos años el Ministerio de Defensa, sólo se han liberado mediante subastas millonarias para pisos de lujo. Pero es que además es el propio gobierno municipal PSOE-IU quien se permite especular utilizando el PGOU como el mayor instrumento de encarecimiento del suelo, mientras que los jóvenes de nuestra Ciudad siguen encabezando los niveles más bajos de emancipación de toda Europa.

Basta ya de propaganda: el dato cierto es que, desde los años 80, el único periodo en que el precio de la vivienda bajó fue entre 1991-1994, precisamente con un alcalde andalucista. Desde entonces, la subida de precios ha sido continuada y desmedida. Frente a esta realidad lo que diga Monteseirín sólo son palabras y mucho humo. También debo recordar que las actuaciones en materia de vivienda del gobierno de PSOE-IU logrado poner en jaque todo el sistema de adjudicación de viviendas municipales, con los escándalos de la Barzola; han situado a EMVISESA en el filo de la navaja ampliando su ámbito de actuación a materias fuera de su competencia, como la ampliación de FIBES; o con la continua venta de humo en torno a la construcción de viviendas, en la que practican la teoría del parchis: ‘hago una y me cuento veinte’.

Sevilla necesita un ambicioso plan de construcción de vivienda pública y de liberación de suelo a bajo precio con un posterior control del precio de mercado. Si cuento con el respaldo de los vecinos y vecinas de Sevilla para alcanzar la Alcaldía, vamos a construir en los próximos cuatro años 24.000 viviendas de protección oficial, y vamos a tomar medidas para que las administraciones públicas liberen suelo y para que las empresas constructoras se impliquen socialmente en un problema del que son parte y en el que tienen mucho que aportar. Ese es mi compromiso.